
En pleno puente de Los Santos, la localidad ha recibido a numerosos vecinos que siempre regresan en estas fechas. Sin embargo, las diferencias con el año pasado son notables.
En primer lugar, en 2020 estábamos en las puertas de la tercerra ola de la crisis sanitaria por lo que los horarios de visitas se establecieron de tal manera que cada persona podía estar un máximo de una hora en el interior y cumpliendo estrictamente las medidas de seguridad.
Para vigilar que todo se cumplía de manera correcta, varios voluntarios de Protección Civil estuvieron a las puertas del camposanto los tres días del puente.
En segundo lugar, el sol brilló y las temperaturas superaron los 20 grados, por lo que favoreció las visitas al cementerio y las salidas a la calle de los vecinos.
Este año, sin embargo, que el horario ya es ininterrumpido de 8 a 19, sin aforos ni medidas de restricción, unicamente el uso de mascarilla y la distancia social, el tiempo no ha acompañado por lo que la estampa en el camposanto es muy diferente. Aunque lleno de flores y con los nichos y panteones impolutos, apenas hay visitantes. Las fuertes lluvias que están asolando la localidad, sobre todo hoy, han hecho practicamente imposible que los vecinos se desplacen hasta allí.
Con el mismo pronóstico para mañana y pasado, se espera que el agua de alguna tregua para que tanto el Día de Todos los Santos, 1 de noviembre, como el de Todos los Difuntos, 2 de noviembre, los quintanenses puedan ir a visitar y llevar flores a sus seres queridos.
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