

Esta mañana de domingo ha tenido lugar la procesión del Niño Jesús de Praga que ha vuelto a las calles de la localidad por cuarto año consecutivo tras más de dos décadas guardado.
Durante todo ese tiempo, la imagen estuvo custodiada en una hornacina situada en uno de los altares de la parroquia Nuestra Señora de los Milagros.
Cuenta con más de 50 años de historia. «El Niño Jesús lo compró Petra Barrantes y lo cedió a nuestra parroquia para que se procesionara cada año», informa Ana Romero, una vecina de la localidad.
Relata que cuando Petra murió dejó una cantidad de dinero para el mantenimiento de la imagen, que en su momento se destinó a fondos de la parroquia.
A lo largo de la procesión de hoy, que ha comenzado al concluir la celebración de la eucaristía en su honor, se han rezado los cantares y oraciones que se habían rescatado por un grupo de mujeres cuando en 2017 volvió a salir la imagen a la calle.
Hoy, ya asentada y recuperada esta tradición en su totalidad, más de un centenar de personas, entre las que ha destacado un gran número de niños que se prepara para la Primera Comunión, han acompañado a la imagen.
El recorrido, que se ha alargado algo más de una hora, se ha desarrollado por varias de las calles céntricas del municipio.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.