Recuerdos del encuentro del 'Amarrao' con la Virgen de los Dolores en un Jueves Santo sin procesiones

Aunque no lo parece, hoy es Jueves Santo. Las calles continúan vacías por el Estado de Alarma decretado, obligando a todos los fieles a vivir esta Semana Santa desde sus hogares. Pero aquí en Quintana, como ya han demostrado con creces desde que comenzó la cuarentena, las medidas alternativas no faltan.

«Las misas se van oficiar en la Iglesia durante la Semana de Pasión, aunque no puede asistir nadie. Se podrán seguir desde las casas a través de la televisión, la radio o Internet», declara el párroco quintanense, Antonio Nogales.

En circunstancias normales, y si la lluvia lo permitiese, en menos de una hora darían comienzo las procesiones en Quintana. Los vecinos ya empezarían a congregarse en la Plaza de España para ver la salida del 'Amarrao' y la llegada a su encuentro de la 'Virgen de los Dolores'. Una estampa tradicional de la tarde de Jueves Santo en nuestra localidad que inaugura los actos procesionales y que este no podremos ver.

Aunque habrá otras opciones. «Desde la televición local, TV Quintana, van a emitir vídeos de las procesiones de otros años para que los vecinos puedan revivirlas», añade Nogales.

Porque este año hay que recurrir a los recuerdos, a las fotografías y a la imaginación para sentir la Semana Santa. Muestra de ello es que en algunos balcones y ventanas de la localidad se hayan expuesto cruces, telas de los colores de las túnicas de las cofradías, escudos o cruces.

Símbolos con un gran significado para esos centenares de cofrades que no podrán vestir este año sus túnicas ni abrocharse el cíngulo dorado. Porque si hay algo que ni la cuarentena ni el Estado de Alarma pueden evitar, es el sentimiento de todos ellos en dias como hoy o mañana.

Por ello, en las cofradías del 'Amarrao', la de 'Hermanos de Jesús Nazareno' y la del Santo Entierro, a la hora de cada procesión, algunos miembros de sus bandas interpretarán desde sus ventanas las marchas rápidas de la salida para recordar cada paso al son de sus tambores y cornetas.

Aunque la lluvia parece haberse solidarizado con las cofradías de Quintana para que la ausencia de sus veneradas imágenes en la calle no resulte tan triste, esta Semana Santa será diferente para todos.