El pasado 5 de enero en la carpa municipal se habilitó de nuevo el dispositivo para la realización de pruebas PCR. A esta medida extraordinaria ya se recurrió en agosto debido al brote de agosto.
Esta vez, desde Salud Pública y en coordinación con el centro de salud de la localidad, decidieron volver a las pruebas diagnósticas masivas debido al elevado número de contactos estrechos que estaban saliendo por el aumento de positivos. De esta manera, explican desde el centro de salud, se evita el colapso del mismo y permite agilizar tanto las pruebas como los resultados.
Desde ese día, se han repetido al menos en cinco jornadas más con la realización a fecha de hoy de más de doscientas pruebas diagnósticas. «Cada día suelen pasar unas cuarenta o cincuenta personas aproximadamente, si son menos, se realizan en el centro de salud», explica un voluntario de Protección Civil.
Ellos son los encargados, junto con el apoyo de los agentes de la Policía Local, de controlar la asistencia e indicar el itinerario de entrada y salida a la carpa para que se realice de manera ordenada.
El último día que se realizaron pruebas PCR en la carpa fue ayer a unas cuarenta personas que presentaban sínotmas o eran contactos estrechos de positivos.
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